Se
 simplificarán los trámites para el  pago de impuestos. Todos los 
ciudadanos deberán manifestar cada año sus  ingresos y utilidades, y 
depositarán lo que les corresponda de  contribuciones, partiendo de 
fórmulas sencillas y de la confianza al  contribuyente. La fiscalización
 se llevará a cabo por sorteo y se  castigará con energía la evasión 
fiscal.