Se
 atenderá a todos, se respetará a  todos, pero se dará preferencia a los
 pobres y a los desposeídos.  Empezaremos a pagar la deuda histórica que
 se tiene con las comunidades y  los pueblos indígenas. Es una infamia 
que en donde hay carencias,  pobreza y marginación, no lleguen los 
apoyos que se necesitan. Las  comunidades indígenas reciben menos del 1%
 del presupuesto público.