Se
 otorgarán concesiones para la  creación de bancos regionales y por 
ramas productivas, con la finalidad  de contrarrestar la falta de 
créditos y la usura. De esta forma se  romperá la inercia de las 
actuales instituciones financieras que viven,  fundamentalmente, a 
expensas de cobrar altas comisiones bancarias y de  los intereses que 
les paga el gobierno.